Sólo se ve bien con el corazón, lo esencial es invisible a los ojos.




martes, 30 de marzo de 2010

Un día con la yaya.

El sábado pasado elpapy trabajó por la mañana, así que Iara, Noa y lamamy se despertaron, desayunaron y se fueron a buscar a la yaya a su casa.

Llegamos allí sobre las 11 de la mañana, la cogimos y nos fuimos para nuestra casa para que pasara aquí el día.

La yaya es muy viejita ya, como dice Noa, y no puede andar mucho por lo que ahora la tenemos que llevar en coche siempre...

Antes, cuando lamamy era pequeña, la yaya siempre venía a vernos a casa de los nonos una vez a la semana, recuerdo que los jueves, cogía el autobús desde su casa y venía a la nuestra, pero desde hace unos cuantos años ya no se atreve a montar ella sola en el autobús, ni en el metro, ni en nada de eso, no se encuentra ya segura la mujer, y necesita a alguien que le ayude a subir y bajar.

Por eso, si no vamos a buscarla, apenas sale de casa a darse paseos por su barrio.

Iara y Noa estuvieron jugando con ella en casa, hicieron dibujos y estuvieron recortando lo que habían pintado.

Luego fuimos a recoger el pollo que habíamos encargado para comer y nos dimos un paseíto por la manzana de casa las cuatro.

Esperamos a que viniera elpapy del trabajo y nos pusimos a comer.

Iara y Noa ya habían comido primero pero también quisieron sentarse en la mesa con nosotros a tomarse su segundo plato.

Después recogimos la mesa y nos sentamos un poco en el sofá para descansar, la yaya se quedó un poco dormida mientras Iara y Noa seguían jugando alrededor.

Ya por la tarde dejamos a la yaya en su casa y nos fuimos los 4 a dar un paseo por el centro comercial.

Aquí dejo unas fotos de Iara y Noa jugando con la yaya.















2 comentarios:

El Tito Sami dijo...

Me alegro mucho de tu buen corazón, hermana.

Seguro que fuiste feliz teniendo a la Yaya cerca y viéndola disfrutar.

Un beso muy grande.

Sonia dijo...

Es una pena que los abuelos, que tanto nos ha cuidado cuando éramos pequeños, se encuentren solos.

Sólo intento que la yaya esté lo más acompañada posible y pueda disfrutar de Iara y Noa.

La llaman yayota y se ríen con ella cuando "hace que se enfada" por llamarla así.

Un beso hermano.

 
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